viernes, 4 de mayo de 2012

Ana Martinez

(Foto cortesía de Depropio)


Autocine

Marie Joe espera en el porche. En cuanto ve llegar el magnífico Oldsmobile, conducido por la cazadora de James, la falda acampanada se le ondula mientras el puño rosa de su rebeca cierra con llave. La cazadora de cuero le abre la puerta del coche y unos jeans le rozan la falda con frenesí. Se escucha un beso. La cabeza de Marie Joe reposa sobre la manga de la cazadora que protege su espalda.

El Oldsmobile arranca, hacia la colina, desde donde divisan las luces palpitantes de la ciudad. La manga de cuero baja la ventanilla, sale del coche, paga la entrada y compra palomitas de maíz y refrescos de cola para la rebeca rosa. Junto a ellos, otras cazadoras y  rebecas guarecidas al amor de otros magníficos Oldsmobile, Buick y Mercury van siendo arrancadas de sus cuerpos y arrojadas al asiento trasero, donde darán rienda suelta a sus placeres.

La rebeca de Marie Joe correrá peor suerte. Un desafortunado golpe de viento la saca por la ventana, y la chupa de James, desesperada e inmóvil, la contempla durante horas emborronada de polvo, sucia y pisoteada por las ruedas de los que poco a poco abandonan la escena.

Cuando los cuerpos sofocados sienten el frío, la cazadora recupera la esperanza, pero Marie Joe no acusa la falta. El coche arranca y la cazadora, ahora perfumada por el dulce olor de Marie Joe, divisa resignada el pálido reflejo rosa en el suelo, mientras al fondo, en la pantalla, un iluminado Charlton Heston divide las aguas del Mar Rojo.




Ana Martínez - Arrimados a la sombra

2 comentarios:

  1. Gracias, qué buenos recuerdos.
    Un beso, Su y todos los colaboradores,
    Ana

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  2. No, si yo soy de última hora, si a última hora he entrado en cienmanos...pero no nos engañas, ese tuneado fué hecho hacía mucho!!! jejejeje.

    Un placer conocerte!

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